Ya son varias las emergencias humanitarias por desastres naturales que hemos visto en los últimos años debido al cambio climático. Inundaciones, derrumbes y heladas, entre otros fenómenos, frente a los cuales SuperGIROS siempre ha estado contribuyendo con la atención de las necesidades de miles de familias damnificadas.  

El pasado 9 de enero, en el municipio de Rosas, Cauca, el derrumbe de una montaña afectó a más de 150 familias de las veredas de Párraga Viejo, Santa Clara, La Soledad y Chontaduro. De inmediato, y a pesar del bloqueo de la vía Panamericana entre Popayán y Pasto, debido a las toneladas de tierra y piedra que cayeron, SuperGIROS inició la entrega de ayudas humanitarias tras la emergencia. 

“En cuanto nos enteramos del derrumbe, coordinamos la compra de las ayudas y la articulación con el Ejército porque somos una empresa generadora de bienestar, por eso nuestra prioridad es darles una mano a las comunidades damnificadas. Sabemos que además de sus viviendas, perdieron su sustento económico”, puntualizó Juan Felipe Gallego, Gerente General SuperGIROS Cauca. 

En compañía del Ejército Nacional, el personal de gestión social de SuperGIROS logró llegar hasta uno de los puntos del derrumbe en la vereda Párraga Viejo para entregar más de 120 mercados, 30 kilos de alimentos para perros, 17 kilos de alimentaos para gatos, 100 frazadas, medicamentos y cobijas. Asimismo, se llevaron 4 tanques de almacenamiento de agua para garantizar el suministro a las comunidades afectadas por el derrumbe. 

“Al menos la avalancha nos dio tregua. Logramos salir vivos, solo con la ropa que teníamos puesta, pero vivos, aunque no pudimos sacar nada de la casa. Espero que las empresas nos sigan colaborando, que no nos abandonen”, dijo Clara Elisa Cruz de Bedoya, una de las afectadas por el derrumbe que también arrasó con más de 100 marranos y pollos de los que Clara y su familia subsistían económicamente.